Sin dudas que la derrota (1-2) frente a Santa Cruz en calidad de visitantes fue un golpe duro, pero en el frio balance existe consenso en que se pagó caro por el primer cuarto de hora, en el cual el equipo mostró desconcentraciones que le permitieron al rival ponerse cómodamente arriba con un 2-0. No obstante, los conducidos por Eduardo “Dunga” Pinto no bajaron los brazos, levantando ostensiblemente su rendimiento descontando a través de Lionel Altamirano (26′) e ir en busca de un empate que lamentablemente no llegó, a pesar de crearse a lo menos tres claras ocasiones de gol, incluido un cabezazo de Christopher Díaz que dio en el travesaño.
El hincha talquino acompañó hasta el estadio Joaquín Muñoz García, y aunque lamentó la derrota reconoció con aplausos el esfuerzo y juego del equipo.
El técnico Eduardo Pinto, sintetizó lo ocurrido en el terreno de juego.
“Los primeros 15 minutos nos desconcentramos y el rival aprovechó esa desconcentración y nos terminaron marcando dos goles. Tratamos de solucionar algunos problemas que no se estaban ejecutando, pero no alcanzó al final, aunque yo me voy tranquilo. El equipo propuso, generó fútbol, quiso ir adelante y ganarlo. No se dio así y que hay que seguir trabajando. Faltó estar siempre atentos al juego, tampoco somos los más malos, porque veníamos jugando bien y el equipo ha cambiado en la forma en estas semanas. La tranquilidad está”, fue el análisis del estratego del Rojinegro.
Más allá del revés, la forma de juego es la que otorga la tranquilidad en que se transita en la senda adecuada: un equipo protagonista en cada partido y a base de una idea de juego clara.
El plantel vuelve a las prácticas este jueves desde las 10,00 horas, con miras al duelo del día lunes ante Deportes Iquique, partido a jugarse desde las 18,00 horas en el estadio Fiscal de Talca.