Ya es definitivo, Alfredo Omar Abalos no continuará en el Rojinegro, con lo cual se va el último referente del club, dejando un vacío importante en la institución, luego de cinco temporadas que lo convirtieron en el goleador histórico de la centenaria institución dentro del modelo Sociedad Anónima. No cumplió con la sumatoria de minutos que establecía su contrato para una renovación automática, y de esa manera finaliza su vínculo contractual.
Ejemplo dentro y fuera de la cancha, el trasandino quien adoptó nuestra nacionalidad, se erigió como un líder positivo a nivel institucional demostrando una calidad humana que lo llevaron a convertirse en un jugador muy querido por la hinchada. Y ese merecimiento, destaca mucho más, teniendo en cuenta que participó en algunos planteles que son fáciles de olvidar.
Su rendimiento individual, muchas veces destacó dentro de un colectivo que no fue el esperado. Alfredo brilló con luces propias; deleitó con sus enganches, gambetas y goles, que aportaron en momentos buenos y en otros realmente complicados, tal cual ocurrió el 2023 cuando Rangers estuvo al borde del descenso a la tercera categoría.
Te ganaste con creces lucir la jineta de capitán, por cuanto tu liderazgo siempre fue en busca de un bienestar grupal, por sobre intereses personales. Merecedor de una distinción muchas veces devaluada con elecciones populares, más que enfocadas a lo que significa la responsabilidad de liderar a un plantel.
Se valora tu compromiso, en tiempos en que la suma de temporadas en un club escasea, ya que a la primera opción de partir, prevalece el beneficio económico, por sobre el cariño a los colores, y tengo claro que hubo más de alguna oportunidad para buscar nuevos horizontes, pero te quedaste luchando por lograr un objetivo colectivo que no se pudo alcanzar, lo cual no desmerece en nada tu gran aporte a la historia rojinegra.
Si bien, este año no fue el ideal, sin el protagonismo que se esperaba, no es menos cierto que al ser requerido cumpliste a carta cabal con el supremo compromiso de entregarlo todo por la camiseta rojinegra.
Gracias Alfred, como te llamamos quienes te hemos conocido de cerca y supimos de tu enorme calidad de persona, lo cual al fin y al cabo es lo que trasciende.
No sabemos qué te depara el destino en términos deportivos, que sea lo mejor para ti y familia, ya que aún te queda por entregar dentro y fuera del verde rectángulo.
Abrazo fraternal.
Gráfica: Iván García Medina, fotógrafo profesional.
